NUESTRO PADRE JESUS NAZARENO :
La primitiva imagen con la que procesionaba la Hermandad sabemos que se veneraba en el templo parroquial de Santiago, habÃa pertenecido a la CofradÃa del SantÃsimo Sacramento y fue destruida en la Guerra Civil.
Al concluir la contienda la Hermandad encargó una nueva talla al escultor valenciano don José MarÃa Ponsoda y Bravo. Esta imagen debió estar concluida a finales de 1944.
La dureza de las formas con que el señor Ponsoda esculpió el rostro del Nazareno resultó llamativa a los miembros de la Hermandad. De ahà que en 1945, pidieron al escultor totanero Antonio Ruiz DÃaz que actuara sobre ella a fin de adaptarla a la estética de esta tierra.
Por acuerdo de la Hermandad la imagen de Jesús Nazareno fue restaurada a finales de 1996 en Priego de Córdoba por Don Cristóbal Cubero Molina. Esa intervención impregnó una dureza al sufrimiento de Cristo.
Tras algunos retoques en la policromÃa la profundidad de esta devoción y el cariño que se le profesa han asimilado esta actuación, necesaria e imprescindible por otra parte para conservar tan preciado tesoro.
SANTO SEPULCRO:
La otra imagen procesional de la Hermandad es la de Cristo Yacente. Se trata de una talla realizada a finales del siglo XIX por el escultor totanero don Juan José DÃaz Ortega. Esta obra no fue destruida en la Guerra Civil, pues se encontraba depositada en la residencia de la persona que en ese momento ocupaba el cargo de Presidente de la Hermandad.
En el año 2016 el Centro de Restaruración de Murcia llevó a cabo una adecuada intervencion en esta pieza de cara a su conservación.